Maleza – La Sepultan y Resiste (2015 - Instinto Música)

Un nuevo clásico Reggae del rock argentino asoma en el encapotado horizonte musical de este milenio. Si bien la cantidad de producciones de discos de música argentina con marcada tendencia Reggae se ha multiplicado exponencialmente montando en la popularidad de algunos artistas latinoamericanos, son pocas las bandas que han logrado vencer la inercia marketinera de los dreadlocks, el porro y las trilladas frases pseudo-revolucionarias modelo 75. 

Maleza cruje desde los cimientos del Reggae vernáculo, por originalidad, trayectoria e identidad. Los compañeros de ruta de los Cafres, han logrado plasmar en un disco debut que trasciende el momento actual de la música, una carrera sinuosa pero enriquecedora, que se eleva desde el pasado para aflorar en el presente. 

La acertada producción artística de Muniagorri/Merli más el toque post-producción de Guillermo Bonetto, da un marco sonoro personal a la obra, descubre el potencial artístico pero interpretando desde adentro el pulso de la banda. Construye una identidad sonora donde se explaya la elocuencia conmovedora de Mariano Belgrano, con su particular forma de interpretar las letras. Una aceitada combinación rítmica fusiona la pulsión rítmica del bajo de Nacho de la Canal, tan característica del Reggae, con la precisión de Marcelo Huck en batería, los condimentos percutivos de Diego González con la urticante y siempre elegante guitarra de Martín Muniagorri que dan la textura rock sin la necesidad de aturdir a nadie. La solida brass de tres vientos, bajo la dirección de Leandro Merli, pivotea en un contrapunto con la voz líder, matizando en un contraste creativo de una llevadera riqueza melódica. Los doce temas originales, son definitivamente un aporte artístico y musical para los amantes del Reggae, el Rock y la música en general. 

Es volver a descubrir música sin el sabor a “producto manufacturado para consumo masivo”, es sangre y palabra en lenguaje sonoro, con la autenticidad de lo humano, imperfecto y vivo como es la música de los hombres.

Por: Martín Cueto ©